Las Salinas del Cabo de gata son uno de los humedales con mayor biodiversidad ornitológica de Andalucía, que se encuentra gravemente amenazado por la rotura de una de las conducciones de agua que alimentan las charcas, provocada por las lluvias de otoño y a la falta de mantenimiento.
Actualmente, la empresa francesa Salins, que tiene otorgada su concesión, mantiene su actividad comercial bajo mínimos y no realiza las necesarias inversiones para garantizar su conservación.
La Junta de Andalucía y la empresa se han responsabilizado mutuamente de esta situación y, aunque la presión ciudadana ha logrado que Salins haya comenzado las tareas de reparación, las obras no se realizarán con la rapidez precisa para que las salinas estén en condiciones de acoger a las miles de aves migratorias que llegan cada año por este época.
El partido verde ha elaborado una doble iniciativa con una pregunta al Gobierno, en la que pide información sobre la situación de las Salinas, a la vez que piden al Ministerio que valore, de acuerdo con la Consejería competente, firmar un compromiso o convenio de colaboración con la empresa Salins, para que quede claro cuáles son las responsabilidades de cada cual en el mantenimiento del humedal. Además, ha preguntado por los mecanismos de coordinación y seguimiento del humedal para garantizar su protección.
«Para garantizar la conservación de las salinas del Cabo de Gata, no podemos seguir dependiendo de los intereses comerciales de las empresas privadas», ha manifestado Sabanés.
